La fuerza de Coriolis es una fuerza inercial (o efecto aparente) que actúa sobre cuerpos que se mueven dentro de un marco de referencia en rotación, siendo el planeta Tierra el ejemplo más notable. Dado que la Tierra gira, esta fuerza desvía los objetos en movimiento libre (como las corrientes de aire o el agua en el océano) hacia la derecha en el hemisferio norte y hacia la izquierda en el hemisferio sur. Este efecto es absolutamente crucial para determinar la dirección de rotación de los huracanes y las corrientes oceánicas. No obstante, hay un mito popular muy extendido: la fuerza de Coriolis es demasiado débil para influir en el movimiento del agua de un inodoro o lavabo; allí, el giro está regido por la geometría del desagüe y las perturbaciones iniciales del agua.

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Fuente: National Geographic y artículos de física geológica.